En Asunción, Paraguay, una curiosa solicitud a un conductor de plataforma de transporte se convirtió en tendencia viral. Según La Nación, una pasajera no buscaba llegar a un destino, sino confirmar si su pareja la estaba engañando.
La mujer contactó al chofer a través de la app y le pidió que la siguiera en sus trayectos diarios para recolectar pruebas. El conductor, sorprendido pero dispuesto, documentó los encuentros de la pareja con fotografías y videos que luego entregó a la clienta.
La publicación original de La Nación destaca que el video con los resultados de esta “investigación” obtuvo miles de reproducciones en pocas horas, desatando comentarios divididos entre quienes aplaudieron la astucia de la pasajera y quienes cuestionaron la ética de involucrar a un tercero en un asunto privado.
Este caso vuelve a poner sobre el tapete el uso de las plataformas de transporte como escenarios de historias insólitas y plantea un debate sobre los límites éticos de la privacidad y la tecnología en la vida cotidiana.
