El 29 de mayo de 2025, el Ministerio de Relaciones Exteriores de China aseguró que el sistema antimisiles global de Estados Unidos no tiene fines estrictamente defensivos y fomenta una escalada armamentística internacional. Durante su rueda de prensa diaria, el vocero Zhao Lijian afirmó que esta red de defensa mina la confianza estratégica entre naciones.
Beijing criticó el despliegue de plataformas como THAAD en Asia-Pacífico y la instalación de interceptores Aegis Ashore en Europa, al considerar que su alcance y capacidad de rastreo comprometen la integridad del arsenal nuclear chino y de otros países. “La expansión de este sistema obliga a ajustar y modernizar los propios misiles estratégicos”, subrayó Zhao.
En contraste, Washington sostiene que su escudo antimisiles está diseñado exclusivamente para neutralizar amenazas de actores no estatales y misiles balísticos de corto y mediano alcance. No obstante, el gobierno chino advierte que la dualidad de algunos radares y lanzadores podría afectar el equilibrio de fuerzas a nivel global.
Analistas de seguridad internacional señalan que el recrudecimiento de estas tensiones podría derivar en un nuevo ciclo de carreras armamentísticas y socavar los actuales acuerdos de control de armas. La advertencia de China llega en medio de un debate global sobre la necesidad de renovar tratados multilaterales que limiten la proliferación de sistemas defensivos.
Fuente: ABC
