En Paraguay, la figura materna ha sido desde siempre un pilar fundamental de la vida familiar y comunitaria. Basada en valores de sacrificio, cuidado y transmisión de costumbres, esta imagen persiste a pesar de las transformaciones sociales y económicas que vive el país.
El debate actual gira en torno a cómo las madres paraguayas compaginan las prácticas tradicionales con las exigencias del mundo moderno: la incorporación al mercado laboral, la migración intra e internacional y las nuevas dinámicas de pareja. Muchas mujeres asumen múltiples roles, combinando sus labores domésticas con empleos formales o emprendimientos, sin dejar de lado la educación de sus hijos y la preservación de la cultura local.
Algunas organizaciones sociales han señalado la necesidad de políticas públicas que reconozcan y apoyen este trabajo invisible que realizan las madres. Según abc, la valorización del rol materno pasa por brindar acceso a servicios de salud, educación y guarderías que permitan a las mujeres desarrollar su potencial personal y laboral sin descuidar el cuidado familiar.