El pasado 20 de mayo en Asunción, un hombre disparó y dio muerte a un presunto ladrón que, según su relato, lo habría atacado para despojarlo de sus pertenencias. El propietario del arma, quien posee una licencia de tenencia legal, explicó en su defensa que actuó en legítima defensa tras sentirse amenazado por el agresor.
En la comisaría local, el hombre presentó la documentación que respalda su portación de arma de fuego y argumentó que mantiene el permiso con el único fin de protegerse a sí mismo y a su familia. Las autoridades policiales informaron que la causa sigue bajo investigación para esclarecer si el uso de la fuerza fue proporcional y correspondiente al riesgo percibido.
La familia del fallecido también se ha manifestado y exige que se deslinden responsabilidades, mientras que el fiscal a cargo evalúa todas las pruebas recabadas en la escena del crimen. Hasta el momento, no se han registrado detenciones adicionales.
abc
