El comercio digital paraguayo se ha consolidado como uno de los destinos más atractivos para inversores de países vecinos. Según datos de La Nación, capitales de Argentina y Uruguay han comenzado a desembarcar en Asunción y Ciudad del Este, atraídos por un mercado en expansión y una regulación que favorece la innovación tecnológica.
Entre los factores que explican este interés destaca el crecimiento sostenido del e-commerce en Paraguay: cifras de la Cámara Paraguaya de Comercio Electrónico muestran que las ventas online superaron los USD 300 millones en 2024, un alza interanual del 30%. Además, la vigencia de beneficios fiscales y la simplificación de trámites aduaneros reducen costos y tiempos de apertura de nuevas operaciones.
La ubicación estratégica del país, en el corazón del Mercosur, también juega un papel clave. Empresas encabezadas por inversores foráneos señalan que Paraguay ofrece una plataforma logística competitiva para distribuir productos a mercados regionales, aprovechando acuerdos de libre comercio y una creciente demanda de consumidores digitales.
Expertos locales subrayan, además, la adecuación de la infraestructura de telecomunicaciones y la expansión de la red de fibra óptica en zonas urbanas y rurales. “Este escenario crea las condiciones ideales para desarrollar aplicaciones, plataformas de pago y soluciones de última milla con costos muy inferiores a los de otros mercados de la región”, explica un directivo del sector.
Con estas perspectivas, analistas prevén que el comercio electrónico paraguayo mantendrá un ritmo de crecimiento superior al 25% anual durante los próximos tres años, consolidándose como un hub tecnológico en el Cono Sur y atrayendo nuevos flujos de inversión extranjera.