El 5 de junio de 2025, la magistrada Allison Burroughs del Tribunal de Distrito de Massachusetts dictó una orden para detener la implementación de la reciente proclama del presidente Donald Trump que prohibía visas a estudiantes y profesionales extranjeros que pretendían ingresar a la Universidad de Harvard. Con esta decisión, la universidad obtiene un respiro hasta el 20 de junio para mantener activo su Programa de Visitantes e Intercambio, según el fallo al que tuvo acceso ABC.
En su resolución, la jueza Burroughs señaló que Harvard sufriría “daños inmediatos e irreparables” si se permitía la entrada en vigor de la orden presidencial sin una revisión completa del caso. La demanda presentada por la casa de estudios alegaba violaciones a la Primera Enmienda, a la Ley federal de Procedimiento Administrativo y a normativas migratorias de largo plazo, al tiempo que denunciaba recortes millonarios en fondos federales vinculados a la controversia.
La proclama de Trump, emitida el 4 de junio bajo el título “Mejorar la seguridad nacional abordando los riesgos en la Universidad de Harvard”, surge en medio de una disputa entre la Casa Blanca y la institución, que ha acusado al mandatario de no tomar medidas suficientes contra el antisemitismo en su campus. Desde Washington, la Secretaría de Prensa de la Casa Blanca defendió la medida argumentando la necesidad de “salvaguardar la seguridad nacional” y calificó los vínculos de Harvard con grupos extranjeros como “preocupantes y radicales”.
Con esta derrota parcial, la Administración Trump ve bloqueada temporalmente su última acción contra la universidad, que desde mayo ha sido objeto de varias decisiones ejecutivas y judiciales. El litigio continuará en los tribunales federales de Massachusetts, donde Harvard buscará consolidar una orden definitiva que impida la revocación de visas hasta la resolución final del caso.
