Un grupo de especialistas en arqueología experimental ha logrado recrear un pan que data de hace aproximadamente 5.000 años, tras su hallazgo en un yacimiento de Anatolia Central, Turquía. Para ello, emplearon harina de trigo salvaje y métodos de cocción tradicionales que podrían haber sido usados por comunidades neolíticas.
El proyecto, liderado por investigadores turcos, combinó estudios de laboratorio con ensayos prácticos en hornos de barro para imitar las condiciones originales de cocción. Este enfoque permitió no solo confirmar la antigüedad del pan —estimada alrededor del 3.000 a.C.— sino también comprender mejor los procesos de fermentación y amasado de la época.
Los expertos indican que este descubrimiento brinda información valiosa sobre la transición de sociedades nómadas a sedentarias, donde el cultivo de cereales y la elaboración de pan jugaron un papel esencial en la alimentación y la economía. Además, el hallazgo destaca el avance de la arqueología experimental como herramienta para revivir ingredientes y técnicas culinarias ancestrales.
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