La administración del intendente Óscar Nenecho Rodríguez remitió a la Junta Municipal el balance general y el informe de ingresos y gastos del periodo enero-abril de 2025, en los que se advierten inconsistencias significativas en las cuentas de los bonos emitidos para obras públicas. Según el documento, las 13 cuentas bancarias de bonos suman G. 4.725.998.465, cuando al cierre de 2024 figuraban apenas G. 804.792.024, es decir, un aumento de G. 3.921.206.441 que no corresponde al avance de proyectos.
En paralelo, el informe de ingresos consolidados muestra un saldo presupuestado de bonos de G. 410.688.317.108, lo que arroja una diferencia de G. 405.962.318.643 con respecto a lo que realmente se detalla en las cuentas bancarias. El mismo reporte indica que en enero no hubo registro de bonos, en febrero aparecen G. 1.040.572.594 y en marzo y abril ya no figura saldo alguno.
Estos descuadres se suman a la denuncia del concejal Álvaro Grau, quien el año pasado advirtió la desaparición de G. 505.000 millones de bonos. La Municipalidad justifica dichas variaciones apelando al uso de la Cuenta Única, pero no aclara el paradero de los G. 500.000 millones faltantes.
En el desglose de ingresos, la comuna reportó G. 650.612.185.122, de los cuales G. 610.198.843.220 provienen de tributos. Del total, se destinó G. 236.025.491.223 (36,3 %) a servicios personales y sólo G. 33.117.501.187 (5,1 %) a construcciones, de las cuales G. 30.907.183.036 corresponden a fondos de bonos (fuente 20). Además, se pagaron G. 50.124.712.329 en “intereses por deuda bonificada” y G. 19.158.891.001 en aportes jubilatorios.
El pasado 9 de junio, la agencia Solventa & Riskmétrica puso en observación las calificaciones de los programas de emisión global PEG G5, G6, G7, G8 y G9 ante el incumplimiento en el pago de intereses y el “hecho relevante” comunicado por Valores Casa de Bolsa SA. Hasta el cierre de esta nota, Fernando Chávez, director de Administración y Finanzas, no respondió los pedidos de aclaración.
