La presión sobre la magistrada Olga Makintach se ha intensificado en los últimos días, luego de que diversos diputados y referentes de organizaciones sociales presentaran solicitudes formales de juicio político. Acusan a la jueza de demorar trámites y de no garantizar la celeridad necesaria en la investigación relacionada con el caso Maradona.
El primer pedido fue ingresado a la Cámara de Diputados el pasado 28 de mayo, respaldado por cuatro legisladores de distintas bancadas, quienes sostienen que las dilaciones de Makintach ponen en riesgo la transparencia y la imparcialidad del proceso. Además, señalan que existe un malestar generalizado por la falta de audiencias clave y la retención de pruebas documentales.
Desde el entorno de la jueza, defienden su actuación y aseguran que los plazos corresponden a la complejidad del expediente. Sin embargo, críticos del sistema de justicia advierten que este caso podría sentar un precedente en la relación entre el Poder Judicial y el Legislativo en Paraguay.
El trámite parlamentario contempla ahora la creación de una comisión especial para evaluar las causales y, eventualmente, elevar el informe al Senado. De prosperar, Makintach podría ser apartada de sus funciones y enfrentar sanciones constitucionales.
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