El barrio San Francisco, ubicado en Zeballos Cue y presentado en 2018 durante el gobierno de Horacio Cartes como solución al déficit habitacional, hoy enfrenta problemas de violencia, microtráfico y desintegración social. Según el arquitecto Jonny Alvarenga, es consecuencia de un diseño aislado que descuidó la producción social de hábitat y la conservación de las redes comunitarias cuya falta generó “desconfianza” y carencia de “tejido social”. ABC
El complejo cuenta con 888 apartamentos y 112 casas entregadas a familias de la Chacarita afectadas por inundaciones, pero sin garantizar su integración económica y social. Alvarenga enfatiza que “muchos vecinos se conocieron recién allí, sin el apoyo que tenían en su barrio de origen” y alerta sobre la “exclusión” que deriva en microtráfico y conflictos internos.
El profesional critica el enfoque tradicional de urbanismo y sostiene que “los recursos económicos son muy limitados en esas familias, que se mudaron a una infraestructura difícil de sostener”. Señala además la importancia de considerar las capacidades locales y trabajar con las comunidades para diseñar y mantener sus viviendas, evitando el hacinamiento y la falta de habitabilidad.
Para revertir la crisis, Alvarenga propone abrir espacios de diálogo reales entre el Gobierno, universidades y los propios vecinos, garantizando su participación en las políticas públicas. “Solo construyendo soluciones junto a los vecinos se podrá dar sostenibilidad a largo plazo”, concluyó en su intervención para la radio 780 AM. ABC