El Chaco paraguayo se consolida como un corredor estratégico para el transporte de gas natural entre Argentina y Brasil, gracias a su ubicación geográfica y sus condiciones topográficas favorables. Estudios recientes destacan que una trazabilidad optimizada por esta región podría reducir costos logísticos y potenciar la integración energética del Mercosur.
Según La Nación, las autoridades paraguayas analizan proyectos de infraestructura que contemplan la construcción de ductos de hasta 800 kilómetros, interconectando campos productores del norte argentino con los principales centros de consumo brasileños. Esta iniciativa no solo fortalecería la seguridad energética de los países involucrados, sino que también podría atraer inversiones privadas y mejorar la competitividad regional.
Especialistas señalan que el desarrollo de este corredor podría generar un impacto positivo en las economías locales, impulsando la creación de empleos y el desarrollo de industrias conexas, como el transporte y la logística. Asimismo, se espera que la ruta energética chacoense contribuya a diversificar las fuentes de energía en Paraguay y sus países vecinos.
