El director general del OIEA, Rafael Grossi, informó que el organismo ha identificado en Yongbyon un nuevo edificio de 95×24 metros con características similares al centro de Kangson, lo que sugiere su uso para el enriquecimiento de uranio y eleva la preocupación por la capacidad norcoreana de fabricar material fisionable para armamento nuclear (ABC).
Estas instalaciones, que se sumarían a las ya conocidas de Kangson y Yongbyon, constituyen “una seria preocupación” y representan una violación de las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU, según la misiva de Grossi a la junta de gobierno del OIEA.
Por su parte, Irán anunció la creación de un nuevo centro de enriquecimiento de uranio en un lugar “seguro” y la sustitución de centrifugadoras de primera generación por modelos de sexta generación en su planta de Fordow, como respuesta a la reciente resolución de la Junta de Gobernadores del OIEA que critica su incumplimiento de los controles de salvaguardia (ABC).
La resolución, aprobada con 19 votos a favor de 33 miembros, considera el comportamiento de Irán como un incumplimiento de sus obligaciones y sugiere la posibilidad de denunciar el caso ante el Consejo de Seguridad; por otro lado, el OIEA advierte que Teherán ha acumulado ya más de 400 kilos de uranio enriquecido al 60 %, acercándose al umbral necesario para fabricar bombas atómicas.