El pasado 9 de junio en Londres, Estados Unidos y China dieron inicio a una nueva ronda de negociaciones con el objetivo de prolongar la tregua arancelaria alcanzada en Ginebra hace un mes. La delegación estadounidense está liderada por el secretario del Tesoro, Scott Bessent; el secretario de Comercio, Howard Lutnick; y el representante de la USTR, Jamieson Greer ABC.
Por su parte, China repite la fórmula de Suiza al enviar al vice primer ministro He Lifeng como jefe de su equipo negociador, según informó el Ministerio de Relaciones Exteriores chino ABC.
En la cita de Ginebra, ambas potencias acordaron rebajar los aranceles de 145% a 30% en productos chinos y de 125% a 10% para bienes estadounidenses durante 90 días. Ahora, en Londres, buscan extender ese pacto y evitar una nueva escalada en sus disputas comerciales ABC.
El presidente Donald Trump calificó las conversaciones como “muy positivas” en su plataforma Truth Social, mientras la portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, insistió en Fox News en la importancia de que ambos países cumplan sus compromisos para mantener el impulso del acuerdo.
Aunque el gobierno británico no participa directamente en las negociaciones, un portavoz declaró a la AFP que respaldan el libre comercio y consideran que una guerra arancelaria perjudica a todas las economías.