El 21 de mayo, el Kremlin afirmó haber repelido un ataque masivo de Ucrania con más de 150 drones contra territorios bajo control ruso, en lo que calificó como una operación de gran envergadura por parte de Kiev. Según reportó abc, las autoridades rusas describieron la acción como una escalada significativa en el uso de vehículos aéreos no tripulados.
En respuesta, entre el 25 y el 26 de mayo las fuerzas rusas llevaron a cabo tres ataques masivos consecutivos contra objetivos en Ucrania. El 25 de mayo ejecutaron el peor bombardeo de las últimas semanas en pleno canje de prisioneros, causando daños en infraestructura civil abc y provocando al menos 13 muertos abc. Al día siguiente, las autoridades rusas lanzaron nueve misiles y 355 drones en su tercer ataque consecutivo, intensificando la ofensiva sobre territorio ucraniano abc.