Asunción, 9 de junio de 2025.— La industria editorial en Paraguay vive un proceso de renovación impulsado por la modernización de imprentas y el fortalecimiento de la producción local, tras recuperarse de la crisis generada por la pandemia. ABC
Según Vidalia Sánchez, titular de la Cámara del Libro de Asunción-Paraguay (CLAP), en la última década la tecnología de impresión alcanzó estándares internacionales, permitiendo elevar la calidad de las ediciones nacionales y competir con mercados consolidados. ABC
Aunque el formato digital avanza a nivel global, el libro impreso mantiene su predominio en el mercado paraguayo, impulsado por una preferencia cultural y por la reciente aprobación de una ley que regula la protección de contenidos digitales. ABC
La pandemia afectó a librerías y editoriales, pero la apertura de nuevos espacios y el programa Ñeʼẽry, que distribuyó 12.000 bibliotecas de aula en todo el país, han reactivado el sector y estimulado el hábito de la lectura entre estudiantes. ABC
El número de publicaciones registradas en la Oficina del ISBN muestra un aumento sostenido, reflejo de una diversificación de géneros y del surgimiento de una nueva generación de escritores paraguayos. ABC
A pesar del crecimiento, la piratería continúa siendo un desafío clave para las editoriales nacionales e internacionales. Cámaras y autoridades han intensificado los controles, y los consumidores muestran una mayor conciencia sobre la importancia de apoyar la producción local. ABC
Uno de los reclamos pendientes del sector es la instalación de bibliotecas públicas y comunitarias que faciliten el acceso gratuito al libro, especialmente en zonas vulnerables, para consolidar el objetivo de convertir a Paraguay en un verdadero país de lectores. ABC