El ministro de Justicia identificó al “factor humano” como la causa determinante detrás del ingreso de teléfonos celulares a las penitenciarías del país, durante una intervención en el programa La Gran 730 de ABC 730 AM. Según explicó, las fallas en los protocolos de custodia y la posible complicidad interna facilitan el contrabando de dispositivos cuyo uso en prisión alimenta redes de extorsión y delitos organizados.
Como respuesta a esta vulnerabilidad, el Ministerio anunció la convocatoria para cubrir 500 plazas de aspirantes a agentes penitenciarios. El curso de formación, que se prevé iniciar el próximo mes, incluirá evaluaciones de aptitud física, pruebas psicológicas y capacitación en normativa y procedimientos de control carcelario, con el fin de fortalecer la vigilancia interna y prevenir futuros ingresos irregulares de celulares.
La iniciativa se enmarca en un paquete de acciones del Gobierno para modernizar el sistema penitenciario y garantizar la seguridad tanto de funcionarios como de internos. Con la incorporación de nuevo personal especializado, las autoridades buscan cerrar brechas operativas y disuadir el uso de tecnología no autorizada en los recintos.