El 18 de junio de 2025, fuerzas militares de Israel llevaron a cabo un nuevo bombardeo contra objetivos en Teherán, capital de Irán, en lo que representa la segunda ofensiva aérea confirmada en menos de una semana. Según fuentes oficiales israelíes, la operación responde a presuntos preparativos de Irán para ataques contra intereses de Tel Aviv en la región.
Tras el impacto de las municiones en los barrios nororientales de Teherán, el gobierno iraní emitió una orden de evacuación inmediata para los habitantes de las provincias occidentales, especialmente en zonas fronterizas con Irak y Turquía, ante el temor de represalias o ampliación de los ataques. La medida busca proteger a la población civil y reubicar a miles de familias en albergues temporales.
Este nuevo episodio de fuego cruzado agrava una ya delicada disputa geopolítica en Medio Oriente, donde tanto Israel como Irán han incrementado sus operaciones de inteligencia y sabotaje mutuo en los últimos meses. Analistas internacionales advierten que, de mantenerse la dinámica actual, el riesgo de un conflicto de mayor envergadura se vuelve cada vez más latente. abc