La isla de Madeira, conocida como la “Perla del Atlántico”, seduce a los viajeros con un escenario natural de picos volcánicos, acantilados y bosques de Laurisilva —Patrimonio de la Humanidad—. Su clima suave durante todo el año la convierte en un destino ideal para quienes buscan combinar aventura al aire libre, cultura local y experiencias gastronómicas auténticas. ABC Color
Geografía y rutas de trekking
El Pico Ruivo, con 1.862 metros, es el punto más alto de Madeira y regala panoramas que van desde los acantilados costeros hasta el bosque Laurisilva. Las clásicas rutas de levadas, como la Vereda do Areeiro, permiten explorar túneles, escarpes y miradores en senderos bien señalizados, convirtiendo a la isla en uno de los destinos de trekking más destacados de Europa. ABC Color
Cultura, festivales y Funchal
Funchal, la capital, concentra monumentos como la Catedral del siglo XV y el Museo de Arte Sacro, testigos de la historia portuguesa de la isla. Cada primavera, el Festival de las Flores inunda las calles de color y aromas, mientras que el Festival del Vino celebra la tradición vinícola local. Estas festividades reflejan la identidad madeirense y su vínculo con la biodiversidad. ABC Color
Gastronomía y experiencias marinas
La oferta culinaria de Madeira fusiona productos del mar y de la tierra: el pez espada negro con banana, el tradicional Bolo de Mel y el vino fortificado son imprescindibles. En la costa, Porto Moniz destaca por sus piscinas naturales formadas en lava, ideales para nadar y bucear, mientras que el avistamiento de delfines y ballenas añade un aliciente más al entorno atlántico. ABC Color