Un grupo de padres y madres de familia decidió tomar pacíficamente la escuela inclusiva ubicada en el barrio San Lorenzo, tras constatar el estado alarmante de sus instalaciones. Aulas con grietas, filtraciones en techos y mobiliario viejo ponen en riesgo la seguridad y el bienestar de estudiantes y docentes, según los manifestantes.
Los representantes de los alumnos aseguran que presentaron numerosas notas y solicitudes de intervención al Ministerio de Educación y Ciencias, pero no recibieron respuesta ni un plan de mantenimiento. Ante la falta de avances, optaron por la medida de fuerza para visibilizar la situación y exigir un cronograma de obras con presupuesto asignado.
La toma se mantendrá hasta que las autoridades del MEC se comprometan a iniciar las reparaciones respectivas. Los padres advierten que, de no recibir una solución en los próximos días, podrían sumar más movilizaciones en defensa de la educación inclusiva en condiciones dignas ABC.
