Este domingo, el Parlamento de Israel (Knesset) decidió suspender todas las sesiones y debates que no estén directamente relacionados con la conducción de la guerra y la seguridad nacional. La medida, adoptada por la presidencia de la cámara, responde a la necesidad de canalizar esfuerzos legislativos hacia actuaciones urgentes en el frente militar.
Según el comunicado oficial, sólo se abordarán proyectos de ley y mociones que tengan un impacto inmediato en el aprovisionamiento de las fuerzas armadas, la gestión de reservas y las políticas de defensa. El resto de temas —incluyendo reformas internas y discusiones parlamentarias de rutina— quedarán postergados hasta nuevo aviso.
La decisión se produce en medio de una intensificación del conflicto y tras semanas de enfrentamientos en distintos frentes. Con esta medida, el Ejecutivo y la coalición que sustenta al gobierno buscan agilizar la toma de decisiones críticas y destinar mayores recursos a las operaciones militares.
Fuente: ABC