En las zonas más remotas del Departamento de Alto Paraguay, los habitantes lanzaron un desesperado llamado de auxilio ante la crítica escasez de víveres. Según denunciaron los líderes comunitarios, desde hace semanas no reciben entregas regulares de alimentos de la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN), lo que pone en riesgo la subsistencia de cientos de familias.
«La población está viviendo al límite. Ni los más básicos insumos llegan con puntualidad», advirtieron voceros locales, quienes aseguran que la falta de caminos y las crecidas de ríos complican la logística de reparto. Esta situación se agrava en lugares como Bahía Negra y Fuerte Olimpo, donde las comunidades dependen casi exclusivamente de la ayuda estatal para su alimentación diaria.
La denuncia de Última Hora subraya que, pese a las promesas de las autoridades de la SEN, los envíos siguen siendo insuficientes y llegan con demoras de hasta un mes. Desde la institución, se comprometieron a reforzar los operativos de distribución, pero no fijaron plazos concretos para normalizar el suministro.
Organizaciones sociales y referentes locales instan al Gobierno nacional a implementar un plan de contingencia que incluya rutas alternativas y coordinación con municipios fronterizos, para evitar que la crisis alimentaria se convierta en una emergencia humanitaria.
