El 12 de junio de 2025, el vuelo AI-171 de Air India, con ruta Mumbai–Londres Gatwick y 242 personas a bordo, sufrió un extraño incidente justo después del despegue en el aeropuerto de Ahmedabad. Según relató el único superviviente, el británico de origen indio Vishwash Kumar Ramesh, “el avión se atascó durante 5 o 10 segundos y se encendieron luces verdes y blancas, como un intento de recuperación” antes de precipitarse contra una residencia de estudiantes de medicina cercana. Última Hora
El impacto causó la muerte de 241 pasajeros y tripulantes, además de al menos 27 personas en tierra, y provocó un incendio que dificultó la evacuación. Ramesh sufrió quemaduras en la mano izquierda, pero logró zafarse del cinturón y escapar por un hueco entre el fuselaje y la pared del edificio, el único espacio abierto que encontró. “Vi a mi alrededor cuerpos y llamas, pensé que no saldría con vida”, declaró desde su cama en el Hospital Civil de Ahmedabad. Última Hora
Las autoridades indias han iniciado un complejo proceso de identificación de las víctimas mediante pruebas de ADN y han recuperado grabaciones que podrían aportar pistas sobre las causas del siniestro. Última Hora
El Gobierno de Narendra Modi ha abierto una investigación oficial y desplegado equipos forenses en Ahmedabad, mientras Air India, propiedad del grupo Tata, habilitó centros de atención para familiares en cuatro aeropuertos y anunció una indemnización de 10 millones de rupias (unos 120 000 USD) por cada víctima mortal.
